SAN JOSÉ DE CALASANZ:LA PACIENCIA Y LA FE DE LOS SANTOS

San José de Calasanz,nació en Peralia de la Sal (Reino de Aragón)actual provincia de Huesca a mediados del del siglo XVI.Este pacientísimo y abnegado maestro de parvulos fué el fundador de las llamadas -Escuelas Pías-,primeras escuelas gratuitas de Europa,alcanzando por meritos propios ser considerado patrono del -Magisterio Español- Su vida fue un ejemplo preclaro de virtudes,destacando siempre por su paciencia,tanto en su trabajo como en su vida interior.En efecto,después de ser ordenado sacerdote por el Obispo de Urgel ,ocupó varios puestos importantes en aquella diócesis,pero habiendo alcanzado cierto éxito en sus misiones,se sintió mal,porque era un hombre sumamente humilde,que deseaba ante todo pasar desapercibido entre sus conciudadanos,lo cual le llevó a marchar de España hacia otros lugares donde le fuera posible realizar su labor,sin por ello recibir aplausos o alabanzas de nadie.Uno de sus primeros destinos fue Roma,la capital del orbe cristiano,entrando a formar parte,por fortuna,de un grupo de teólogos que asesoraban al cardenal Colonna ,aunque en sus ratos libres decidió alistarse al conjunto de trabajo de la -Hermandad de la doctrina cristiana-,que se ocupaba de instruir a los hijos de jornaleros y artesanos.Más tarde,como consecuencia de su gran amor y misericordia hacia aquellos jovenes y niños ,tras producirse el desbordamiento del rio Tíber (La mayor catástrofe de aquel siglo),en el que se produjo más de dos mil muertos,quedando centenares de familias sin techo,ni alimentos,se sintió atraido por la idea de crear un instituto para la enseñanza de los hijos de las gentes más necesitas.Para ello,eligió el barrio de Transtiber,donde puso en marcha esta magna obra con la ayuda inestimable del cura de la parroquia de santa Dorotea,Don Antonió Bendoni,el cual le ofreció hasta su propia casa.En principio,todo parecia marchar muy bien...y el santo varón lleno de paciencia y amor dedicaba muchas horas a la enseñanza de aquella juventud tan necesitada de ello..Su deseo era que comprendieran sobre todo la importancia de conocer cada vez más cosas que les permitieran,en un futuro,abrirse camino en la vida.Fue sin duda el maligno,el que influenció sobre algunos maestros de las escuelas de Roma en contra de la labor llevada acabo por José de Calasanz al que acusaron,sin prueba alguna,de entorpecer la enseñanza de la juventud y del que hasta levantaron falsos testimonios que provocaron finalmente la intervención del -Santo Oficio-***** El Señor,no obstante,estaba con este hombre santo, que sufrió todo aquel escarnio con ánimo hasta que finalmente se demostró que era totalmente inocente.Sobrevivió a tanto sufrimiento moral gracias a su enorme paciencia e inmenso amor a Dios y a sus hermanos,llegando a alcanzar la avanzada edad de noventa y dos años.Esto sucedió ,no sin antes haber profetizado a sus hijos espirituales que la -Escuelas Pías- se verían plenamente reconocidas después de un breve espacio de tiempo,tras su muerte,cosa que sucedió durante la estancia en la Silla de Pedro,del Papa Alejandro VII(1655-1667) y el Papa Clemente IX(1667-1669)*****Fue canonizado en 1677 por el Papa Clemente VII y las llamadas -Escuela Pías- se desarrollaron por el mundo entero,regidaspor la orden de los hermanos escolapios,fundada por Paula Montal,las calasancias,hermanas de las escuelas cristianas de Vorchelar y un largo etc.Se puede decir que san José de Calasanz es sólo uno de los miles ejemplos que nos han hablado a los hombres de todo el mundo del importante papel que juega la virtud de la misericordia hacia los más necesitados y de la virtud de la paciencia tan necesaria a la hora de realizar estas obras del Señor.El mismo apóstol san Juan en su libro del Apocalipsis,en varias ocasiones,hace referencia al fruto del Espíritu Santo de la paciencia,unido al principio teológico de la fe (Ap 14, 12-13):"Aquí la paciencia de los santos los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús/Oí una voz que venía del cielo y que decía:Escribe:Dichosos desde ahora los muertos en el Señor.Sí,dice el Espíritu,para que descansen de sus trabajos,porque sus obras los acompañan"